Por: Ernesto J. Navarro
Finalizando noviembre de 2014, fui a entrevistar a Ildefonso Leal, es doctor en
historia, director de la Academia Nacional de la Historia y cronista de
Los Teques.
Vive en una hermosa casona colonial que resistió al
avance del cemento y que parece un monumento herórico a la vida,
plantado en medio de dos enormes edificios de apartamentos y un ruidoso liceo.
Me citó el miércoles 26 de
noviembre a las 10:15 de la mañana. Yo llegué a las cercanías de su casa a eso de las 9:50am, miré el reloj ycomo tenía algo de tiempo, me
senté en una cafetería que está justo enfrente de la residencia del cronista y pedí un
marrón oscuro, para beberme la espera.
Al terminar el café miré de nuevo el
reloj: 10:10am y cuando salí de la cafetería y miré a la casa del
cronista, ya el doctor Leal estaba caminando pegado a la reja de la casa,
esperándome, plantado con la elegancia de sus 82 años.
Lo saludé desde la acera y le grité:
-¡Buen día! Yo soy el periodista Ernesto Navarro.
Ildefonso Leal |